jueves, 6 de mayo de 2010

¿Dónde está la felicidad?

Al principio de los tiempos se reunieron varios demonios para hacer una travesura. Uno propuso:
-Tendríamos que robar algo a los hombres. El problema es: ¿qué les robamos?.
Tras pensarlo mucho, uno dijo:
-¡Ya lo sé! Les robaremos la felicidad. Pero el problema está en dónde esconderla para que no la puedan recuperar....
Uno opinó:
- Podríamos esconderla en la cumbre de la montaña más alta.
Pero inmediatamente, otro replicó:
- No, recuerda que tienen fuerza. Alguna vez alguien puede subir y encontrarla. Si uno la encuentra, enseguida todos sabrán dónde está....
Inmediatamente otro propuso:
- Vamos a esconderla en el fondo del mar....
Pero acto seguido le replicaron:
- No, recuerda que son curiosos. Alguna vez alguien llegará a construir un aparato para poder bajar y la podrá encontrar....
Y todavía otro dijo.
- Escondámosla en un planeta bien alejado de la Tierra.
Y le respondieron todos:
- No, recuerda que son inteligentes, y cualquier día habrá alguien que construirá una nave que pueda viajar y descubrirla. Y entonces, todos tendrán la felicidad...
El último de ellos era un demonio que hasta aquel momento había estado callado escuchando atentamente cada una de las propuestas de los otros. Tras hacer un análisis de cada una, propuso:
- Creo saber dónde ponerla para que realmente nadie nunca la encuentre.
Los demás, sorprendidos, le dijeron a coro:
- ¿Dónde?.
El demonio respondió:
- La esconderemos dentro de ellos mismos. Estarán tan ocupados buscándola fuera, que nunca la encontrarán.
Todos reconocieron que tenía razón y estuvieron de acuerdo. Y, desde entonces, ha sido así: el hombre se pasa la vida buscando la felicidad por todas partes sin darse cuenta que la lleva escondida dentro de sí mismo.

Anónimo

En parte estoy de acuerdo con la historia, porque es verdad que a veces no nos damos cuenta de lo afortunados que somos, simplemente por ejemplo por tener salud, pero yo creo que lo que suele pasar es que cuando tienes las cosas a veces no las aprecias y siempre quieres más o piensas que lo que tiene otro es mejor y a veces en cierta manera puede ser verdad.
La cosa no es ser conformista, sino valorar si lo que tienes quizás es mas que de sobra para vivir feliz, y sopesar "el coste" que podría tener seguir empeñado en buscar la supuesta felicidad "que no tienes" y no dejar que la envidia, la avaricia o el egoismo "te pongan una venda" y no te dejen ver que a lo mejor la tienes delante de tus narices.
Esto es muy facil decirlo y pensarlo, pero en la práctica hacerlo no es tan fácil....

Yo misma

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...